The Walking Dead será una masacre, nadie está a salvo

Tras tres entregas repletas de violencia, drama, muerte y muchos, muchos zombis, parece que la cuarta temporada de The Walking Dead tampoco se quedará corta. De hecho, la nueva entrega de la exitosa serie de AMC podría convertirse en la más mortífera de su trayectoria, según los últimos detalles avanzados por el productor ejecutivo David Alpert. “Lo bueno de esta serie es que todos los personajes, literalmente, están encima de la mesa… No hay ninguno que sea intocable“, ha asegurado en una entrevista con el blog AMC.

Sin embargo, que los guionistas estén cada vez más familiarizados con la muerte de los personajes no quiere decir que sea una tarea fácil: “Una de las cosas más duras fue matar a Shane. En el cómic había pasado mucho, mucho antes, y Robert Kirkman dijo que quería darle al personaje un poco más de espacio para respirar. Tratar de encontrar el momento adecuado para matarle fue realmente difícil… En la sala de visionado que tenemos en producción hay una pared en la que pone ‘Nuestros muertos’ y hay fotografías de todos los personajes que han  fallecido a lo largo de las temporadas. Es una locura: por un lado es conmovedor y, por otro, hemos matado a mucha gente en esta serie“, añade.

Asimismo, Alpert tiene clarísimo que la pared tendrá un montón de fotografías nuevas cuando la cuarta temporada arranque en AMC: “Un montón de gente va a ser añadida a esa pared. Vamos a ver una evolución en los caminantes -hay un montón de caminantes nuevos- y también veremos una evolución del trato entre humanos. La posibilidad de la civilización hará que la gente esté mucho más desesperada y dispuesta a hacer cosas que antes eran impensables“. Teniendo en cuenta la inyección de supervivientes recibida por el grupo liderado por Rick Grimes (Andrew Lincoln), parece bastante probable que la salida de muchos de ellos sea igual de fácil que su llegada. No obstante, también podemos esperar la pérdida de un par de personajes principales.